Tomó una donación de $170.000 después de quedarse sin hogar, pero prefirió comprarse un auto de lujo

Malika Chalhy hizo una denuncia públicamente a sus padres por que la habían echado de la casa a patadas por su orientación sexual. Su caso conmovió a Italia y miles de ciudadanos se ofrecieron a ayudarla "a reconstruir su vida".

Malika Chalhy es una joven de 22 años que fue expulsada de su hogar tras confesar a sus padres que era lesbiana y estaba enamorada de otra mujer, no solo lo dio curiosidad a su propia familia si no también a extraños por las redes sociales, pero también sacudió a toda Italia. No solo se encontraba sin hogar, sino que fue amenazada de muerte por su propia madre, según medios que difundieron la historia con un final que nadie esperaba por lo que hizo con la ayuda que recogió.

Malika tuvo que buscar la ayuda de sus amigos para evitar dormir en la calle y pidió a las autoridades italianas que la ayudaran a recoger las pertenencias que dejaron sus padres, pero su madre también negó conocerla. Cuando su caso se volvió viral en más de una red social, la joven lanzó una campaña GoFoundMe, afirmando en la descripción que el dinero recaudado la ayudaría a "reconstruir su vida" y comprar una nueva casa.

MONTO RECAUDADO POR DONACIÓN

Como se esperaba, la situación de Malika tocó a una gran cantidad de buenos samaritanos y logró recaudar $ 170,000 en una primera recaudación de fondos a través de GoFundMe y otros 15,000 en un segundo. No solo algunos medios italianos reconocidos se preocuparon de hacerse eco de este asunto, sino que también sintonizaron programas de televisión como el Show de Maurizio Costanzo, que la invitó a contar su historia.

Sin embargo, recientemente se descubrió que la señorita italiana había comprado un Mercedes Benz Clase A a través de donaciones, convirtiendo lo que comenzó como una iniciativa solidaria en una ola de indignación. Fue la propia Malika Chalhy quien publicó un video en sus redes sociales en el que mostraba cómo conducía el lujoso automóvil, por lo que ha sido objeto de innumerables críticas.

Aunque trató de justificarse asegurándose que el vehículo pertenecía a los padres de su actual pareja, con quien vive en Milán, aparentemente esto fue solo una mentira ya que ella misma confesó que quería darse un capricho cuando se le preguntó sobre el origen del coche. “Me compre un buen coche, podría haberme comprado uno pequeño y no lo hice. Si mentí sobre el coche es porque me encerraron, me metieron en un armario”, dijo la joven, según recoge el medio italiano Il Giorno.

Asimismo, se supo que no solo compró un automóvil caro, sino que también adquirió un Bulldog Francés valorado en $3,000. Según el vendedor, la joven de 22 años insistió en llevarse el perro más caro que tenía y, aunque al principio no lo reconoció, luego se enteró de quién era. “Gastó 3 mil dólares, pagó con transferencias bancarias, una el 15 de mayo y otra el 21. Se llevó al más caro”, reveló el comerciante.